En la marcha del 06 de octubre del 2016 por toda Carabobo, mientras una multitud de jovenes, ancianos y personas de todo tipo de edad, sexo, ocupación y color pasaban lanzando arengas por la paz, una niña Embera miraba todo como si supiera y al mismo tiempo no lo que estaba pasando. El nivel de extrañeza pero a la par de una misteriosa certidumbre que tenía su mirada me atrajo, cuando le tomé esta fotografía, cuando la estaba enfocando me miro como quien descubre y es descubierto al mismo tiempo.